Cualquier profesional que se inicie en la gestión de la formación programada/bonificada de FUNDAE se sorprende ante la terminología que se estila para definir ciertos conceptos que en el uso habitual de la formación/educación en general aparecen definidos con sentidos diferentes a los utilizados en un contexto laboral. De esto trata mi entrada de hoy.

Es fácil deducir, en primer lugar, que las diferencias en el lenguaje obedecen al interés de los técnicos en deslindar el ámbito académico del ámbito laboral. En la formación académica se utilizan los términos, alumno, diploma, etc., mientras que en la formación de ámbito laboral se utilizan otros sinónimos, otra jerga.

  1. Formación programada por las empresas

Empezando por el principio: denominación imprecisa donde las haya. ¿Acaso no es cierto que toda formación en el seno de la empresa puede denominarse del mismo modo? Incluso la que no es bonificada es programada por las empresas. Si el objetivo de la Ley 30/2015 era poner el acento y centrar el asunto en lo principal, lo ha conseguido: el protagonista del modelo es la empresa al margen de que también participen, en ocasiones, otros actores secundarios.

  1. Crédito frente a disponible

La utilización de la palabra “crédito”, seguramente no es muy acertada en el contexto de la formación. Todos tenemos en la cabeza que un crédito es una cantidad de dinero (principal) que, generalmente, una entidad financiera pone a nuestra disposición, cantidad de la que luego habrá que responder (devolver), añadiéndole los intereses. ¿Qué significa crédito en el ámbito de la formación programada? la cantidad de dinero disponible para que una empresa financie la formación de sus trabajadores y que luego descontará de la cuota que ingresa a la Seguridad Social, mes a mes. Tal vez otra denominación hubiera sido más acertada.

  1. Agrupación vs grupo de empresas

Toda entidad organizadora constituye lo que se denomina “agrupación de empresas” que es el conjunto de entidades indiscriminadas que firman con la organizadora el contrato de encomienda para poder gestionar la formación de manera conjunta. Sin embargo, y en otro perfil de acceso a la aplicación telemática, también existe lo que se denomina “grupo de empresas”, que es el conjunto de empresas que están relacionadas entre sí, generalmente por una dirección común o un control ejercido por una empresa matriz sobre las empresas subsidiarias. No hay que confundir una con otra, aunque grupo de empresas y agrupación de empresas sean conceptos sinónimos. Pero son realidades diferenciadas. Con un poco más de imaginación habríamos podido enderezar tuertos y disipar toda posibilidad de confusión.

  1. Curso, acción formativa, grupo

Aquí se trata de un hallazgo porque generalmente en el ámbito formativo utilizamos la palabra “curso” como un comodín que nos sirve para todo. Incluso para confundirnos.

La acción formativa viene definida por sus objetivos, contenidos, modalidad y número de horas. El hallazgo viene dado por el hecho de que “curso”, que es una especie de cajón de sastre nos puede despistar porque unas veces se refiere a acción formativa, otras a grupo y así no hay quién se entienda.

Grupo es el conjunto de trabajadores (porque estamos en el ámbito laboral) que siguen una acción formativa. Lo que notificamos es el grupo formativo: inicio, modificaciones y fin.

  1. Formador, tutor, instructor, profesor, facilitador …

En la aplicación telemática con la cual se gestiona la formación bonificada se utilizan dos términos: formador, que se encarga de impartir conocimientos y habilidades a un grupo de personas en el contexto de la formación presencial y tutor cuando nos referimos a la teleformación. El tutor es quien proporciona apoyo individualizado y orientación a las personas participantes en la formación y debe mantener una actitud proactiva, es decir, no espera a que le consulten, sino que propone diversas actividades.

Instructor y profesor son dos denominaciones que se usan más en contextos formales de los diferentes niveles de la formación reglada: FP, universitaria, etc.

Monitor, preparador, facilitador, se utilizan en ámbitos deportivos e informales: reuniones, jornadas, debates, Análisis Transaccional, etc.

  1. Alumnos, participantes

Alumno se utiliza en la formación formal (reglada): colegios, escuelas, universidades. Participante es un concepto más amplio que se utiliza, por ejemplo, en la formación programada que se imparte en el ámbito laboral. En este caso, la relación entre formador y participante suele ser más horizontal y colaborativa.

  1. Diploma, certificado

Aunque hasta hace poco no se facilitaba desde la aplicación telemática de FUNDAE diploma como justificante de haber realizado una formación por considerarlo más propio del ámbito académico y en la línea seguida para otros temas de diferenciación entre ambos contextos, es decir, el académico (formal  reglado) y el laboral (formación no reglada), actualmente sí se facilita diploma de aprovechamiento a aquellos participantes (alumnos) que superan la evaluación, mientras que a quienes no la superan se les proporciona un certificado de participación.

Por último diré que la formación programada por las empresas goza de muchas virtudes como su flexibilidad y adaptabilidad a las necesidades de cada empresa. Pero también la terminología (jerga) que utiliza adolece en ocasiones de falta de precisión y diferenciación respecto de otras formaciones. ¿Cómo significar de una forma más acertada la formación que utiliza los fondos del crédito que generan las propias empresas?

Propuesta final: no estaría de más poner en marcha un concurso de ideas para crear una terminología propia que identifique de manera inequívoca la formación bonificada frente a otras formaciones no bonificadas, pero también programadas. ¿Tal vez esto ayudaría a que las empresas reflejaran en cuenta separada de su contabilidad todos y solos los costes de la formación para el empleo?

Un comentario en “Desvelando la jerga de la formación programada”

  1. A mi me sorprendió al principio cuando me inicié en la formación bonificada pero reconozco que de este modo es mucho más intuitivo e induce a menos error. Gracias por su entrada.

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